Para tener todo controlado y que tu caldera no te estropee el día, echar un vistazo a tu caldera para hacer una revisión rápida, puede evitar que haya una avería y que vaya a más.
Y es que en ciertas ocasiones no le prestamos todo el caso que nuestra caldera se merece, sobre todo en los meses en los que menos recurrimos a ella, como pueden se los meses de verano.
A pesar de no usarla, de reducir su uso, no podemos dejar de revisarla de vez en cuando, de este modo evitaremos que cualquier tipo de mal función o pequeño fallo, se convierte en una rotura o en una avería mucho mayor de lo que podría ser en un principio.
Cuando se trata de un pequeño mantenimiento, en otoño es la mejor época para llevarlo a cabo y realizarlo. Aunque si ves que lo que te pide la caldera es una buena revisión, ya sabes que los expertos con los que tienes que contar es, con los de Cuidur.
Así que, para ver cuáles son los puntos en los que se debe estar atentos para realizar una revisión de la caldera y echar un vistazo a tu caldera, vamos a dar unos pequeños pasos en los que debemos fijarnos para que todo funcione correctamente y evitemos problemas.
Lo primero de todo será revisar el conducto del gas, para verificar que está en perfecto estado, que no hay fallos en las conexiones, no hay fisuras, ni cuarteamiento, vamos que todo el sistema está en buenas condiciones.
Si detectamos cualquier fuga, cualquier fallo o deterioro, lo primero que tendremos que hacer es cortar la llave de paso del gas, para evitar seguir perdiendo el combustible y causar un daño mayor, y ponerte en contacto con el servicios técnico, ya sea de la caldera, ya sea el de la compañía del gas. No queremos que corras riesgos que no debes.
Una vez que hemos revisado que el conducto deja pasar el gas correctamente, pasamos a enchufar la caldera y a encenderla, y a verificar que no existe ningún error en pantalla, en el caso de que disponga de una.
Así que vamos a fijarnos en la pantalla y los sonidos o dígitos que aparezcan en ella, ya que gracias a sus indicaciones podremos averiguar el estado de la caldera. En ella se nos indicará la presión que tiene y la temperatura.
Lo lógico será que la presión se encuentre entre 1,2 y 1,5 bares, que es la cantidad que, por norma general, establecida como correcta. Si necesitas modificar esta presión, ya te hemos indicado en otra entrada de nuestro blog cómo realizarlo, pero vamos a refrescar la memoria.
Para dar más presión a la caldera, existe una pequeña llave que se encuentra debajo de la caldera, que tendrás que girar. Dependiendo del sentido en el que gires la llave, darás o quitarás presión. Si giras en el sentido de las agujas del reloj, reducirás la presión de la caldera.
Por el contrario, si lo haces en el sentido contrario a las agujas del reloj, aumentarás la presión. Hazlo poco a poco y con cuidado, para evitar cualquier incidente.
Con esto ya habrás realizado una revisión rápida, en un vistazo a tu caldera, para dejarlo todo preparado para volver a dar un uso más continuado y pensando en los meses de mayor frío.
Pero si lo que quieres es una revisión más a fondo, que te asegure y te repare cualquier incidente que tengas con ella o con sus diferentes componentes, mejor recurre a profesionales, saben lo que hacen y no tendrás problemas.
Así que no dudes en contactar con Cuidur, estamos aquí para ayudarte.