Como ya te hemos comentado, el verano es un buen momento para revisar tu caldera y evitar que en verano aparezcan cualquiera de los errores más frecuentes en una caldera.
Y cuando aparecen estos fallos, lo que quieres es que se resuelvan lo antes posible, porque el invierno puede ser muy duro, aunque solo sean unos días, sin tener calefacción en casa.
Pero cuando aparece un error ya no hay marcha atrás y lo mejor es intentar solucionarlo de la mejor manera y de la forma más rápida. Por eso un pequeño diagnóstico al tipo de fallo que está dando la caldera nos puede dar una idea de donde puede estar la avería y como solucionarla.
Así que vamos a ver los fallos más frecuentes y así sabrás a qué se deben:
¿No te ha pasado nunca de dar al agua caliente y que no salga nunca? Puede que estemos esperando un rato, ya que en algunas calderas la demora en la producción de agua caliente es mayor que en otras, o que simplemente tarda más a llegar a ese grifo, puesto que está peor localizada con respecto a la caldera.
Pero si nunca acaba de llegar el agua caliente, entonces entendemos que hay un problema y deberemos comprender donde está para solucionarlo.
Puede que la presión sea baja, debe estar un poco por encima del 1,5Kg para que la bomba de presión envíe el agua correctamente. O puede que el fallo se deba a la válvula responsable de dar el paso al agua caliente o a la calefacción. Si es así, deberá ser sustituida.
Los famosos cambios de temperatura del agua cuando te estás duchando, pero eso sí, no porque alguien habrá un grifo o corte el agua caliente. Si esto pasa sin que haya ninguna intervención humana, entonces el problema estará en la caldera y puede deberse a un fallo en el intercambiador, que se ha deteriorado. Se repararía con un cambio de pieza.
Si solo cambia la temperatura y el agua sale más templada, entonces el problema puede estar en el caudal, y consumes más agua caliente de la que la caldera puede calentar.
El apagado repentino de la caldera es otro de los problemas más frecuentes a los que nos hemos tenido que enfrentar. Si esto ocurre sin estar programado su apagado, entonces debemos realizar una visitar y revisar su caldera, ya que el fallo puede que esté en la bomba de recirculación, como ya nos ha ocurrido en otras ocasiones.
Los famosos silbidos, goteos o extraños ruidos que suelen venir ocasionados por la entrada de aire en el circuito, que la bomba tenga una avería o que la presión del agua sea muy baja.
Si estos ruidos son similares a un rozamiento, deja que un técnico se encargue de la reparación de la caldera.
En algunas calderas, sobre todo en las más modernas, hoy por hoy, ya cuentan con pantallas digitales que se encargan de informar del error, ya sea visualmente o bien mostrando un código que informa sobre su procedencia.
Cuando muestra el código correspondiente y la caldera no enciende, el error más común suele ser una obstrucción en la salida de gases, que debe ser arreglado de inmediato si no tener un problema mayor, al provocar una fuga de monóxido de carbono.
Para cualquiera de estos problemas, que son los que más nos encontramos cuando contactáis con nosotros, la solución la tienes fácil, ponte en contacto con nuestros técnicos de Cuidur.